Continúa el episodio de calor extremo, con Jaén ya en la cota de los 40 grados

Las últimas actualizaciones de los modelos meteorológicos confirman lo que ya se venía anunciado: la extraordinaria intensidad del episodio de calor de verano en mayo. Las temperaturas, tanto las máximas como las mínimas, comenzaron a subir el lunes, una escalada que siguió el martes, se intensificó el miércoles ―con 38,2° en Villarrobledo (Albacete) y 37,7 en Cazorla (Jaén)― y va a continuar siendo “progresiva y generalizada” día a día hasta el sábado, explica Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Para este jueves se esperan ya los primeros 40° del año en puntos de Jaén. El viernes y el sábado serán los días más cálidos, ya que el domingo se espera un descenso “importante” en los termómetros en el tercio oeste de la Península. En cambio, el ascenso térmico proseguirá en el tercio oriental y en Baleares, donde vivirán su peor día del episodio.

Este jueves se subirán al carro de los 32° amplias zonas de la Meseta norte, el Prepirineo y Baleares. Se esperan 36° en la depresión central del Ebro, la zona centro y Meseta sur, mientras que puntos del valle del Guadiana rondarán ya los 38°, igual que buena parte del valle del Guadalquivir. No se descarta que se alcancen los 40° en puntos de la provincia de Jaén, tras dos noches tropicales ―en las que los termómetros no bajan de 20°― consecutivas en el propio interior de Andalucía, la costa mediterránea andaluza y la cuenca del Ebro. Hay aviso amarillo ―el más bajo de una escala de tres― por calor en la Comunidad de Madrid y en todas las provincias andaluzas menos Huelva y Málaga.

El pico del episodio se producirá entre el viernes y el sábado, cuando las noches tropicales se extenderán por el sur, oeste, zona centro y cuenca del Ebro. De día, el viernes se superarán los 34° en la meseta Norte y en el valle del Ebro y los 36°, en buena parte del centro y sur peninsular. Se esperan 38° en el valle del Guadiana y 40° en el del Guadalquivir. “Incluso se pueden superar los 42° en puntos de la provincia de Jaén”, advierte Del Campo. Este día llegarán los primeros avisos naranjas ―el segundo nivel o riesgo importante― a Andalucía, mientras que serán amarillos en Castilla-La Mancha y Extremadura.

El sábado “supondrá una nueva vuelta de tuerca” al calor y será un día “muy caluroso, incluso para pleno verano”, subraya la Aemet. Amanecerá con mínimas superiores a 22° en Andalucía y Extremadura y noches tropicales en el Ebro, la Meseta norte y la costa mediterránea. Se superarán los 35° en buena parte del interior peninsular, los 38° en el Ebro y Meseta sur y, de nuevo, los 40º o 42° en el Guadalquivir. En Mallorca los termómetros pueden trepar por encima de los 35°.

El domingo, con el descenso por el oeste, el calor más intenso se dará en Andalucía oriental, donde pasarán de 38°; y en el nordeste de la Península donde, si se cumplen los pronósticos, también rebasarán los 38° e incluso los 40º/42° en el valle del Ebro, algo que el meteorólogo califica de “insólito” para mayo. Incluso en el Prepirineo y en Mallorca se podrían superar los 36°. En cambio, ese día en Sevilla, Badajoz o Córdoba, las máximas se quedarán por debajo de los 35°. En el norte de Galicia, en las comunidades cantábricas y en Canarias “no se notará tanto el episodio cálido”, ya que los vientos del norte refrescarán un poco el ambiente. Canarias también vive al margen del horno ibérico gracias a que los vientos alisios mantienen a raya las temperaturas.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.

Suscríbete

La bajada generalizada de las temperaturas no llegará hasta el lunes, aunque aún seguirá haciendo mucho calor en el tercio oriental peninsular, donde el descenso de las temperaturas se espera a partir del martes o el miércoles. No obstante, este alivio puede ser transitorio. El portavoz de la Aemet vaticina que, aunque aún hay mucha incertidumbre, en la segunda mitad de la semana puede volver otra vez el calor, aunque no tan intenso. “Este mayo está siendo de los más cálidos de los últimos años en nuestro país”, certifica Del Campo.

El efecto salvador de la calima y las nubes

Hay dos factores que pueden atemperar los valores tan altos que apuntan los modelos. Uno son los chubascos. Por el contraste entre el calor en superficie y el aire frío en capas altas, se formarán nubes de evolución, que provocarán chubascos tormentosos aislados en zonas de montaña, sobre todo del norte y este peninsular, sin que se puedan descartar en puntos de centro, explica el meteorólogo. Esas nubes harán de paraguas allá donde se formen y evitarán que las máximas se disparen tanto.

El otro factor que puede amortiguar la subida es la llegada de polvo en suspensión a partir del jueves al sur y al este de la Península, que el viernes y el sábado se extenderá ya a toda la Península y Baleares. La calima actúa también como paraguas y evita que los rayos del sol impacten directamente con la superficie, la calienten y aumenten las temperaturas, como ya ocurrió con la ola de calor del pasado julio, cuando su presencia rebajó en un par de grados el pronóstico.

Enlace de origen : Continúa el episodio de calor extremo, con Jaén ya en la cota de los 40 grados