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La evolución de los incendios en España va in crescendo debido a otra “inédita” ola de calor que ha llegado solo semanas después de la registrada al inicio del verano y que mantiene en riesgo extremo de incendio a toda la Península y las Islas Baleares. Los distintos dispositivos de extinción se enfrentan este sábado a 35 incendios: 19 activos (cinco más que este viernes), 14 controlados y dos estabilizados, según los últimos datos de la Dirección General de Protección Civil. En el transcurso de esta mañana buena parte de los esfuerzos se han concentrado en tratar de controlar las llamas que devoran el Parque Nacional de Monfragüe y que se iniciaron en el municipio cacereño de Casas de Miravete el jueves. También preocupa el fuego que en la mañana del viernes se originó en Mijas (Málaga) y que se abre camino hacia los municipios de Alhaurín de la Torre y Alhaurín el Grande. Mientras, y al mismo tiempo, se retiraban los efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) de Figueruela de Arriba (Zamora), próximo a la ya arrasada Sierra de la Culebra, y se rebajaba el incendio a nivel 1.

Protección Civil ha desplegado el 70% de sus recursos, incluidos efectivos UME —con más de 600 militares desplegados— en cuatro de los principales siniestros: Las Hurdes-Ladrillar-Monsagro (Cáceres-Salamanca), Monfragüe, Folgoso do Courel (Lugo) y Navafría (Segovia). No obstante, la situación está sujeta a cambios constantes y los vecinos desalojados y evacuados se cuentan por miles.

La superficie forestal quemada a 3 de julio —fecha del último informe de Protección Civil— era de 70.354 hectáreas, casi lo mismo que ardió en todo el año 2021 (75.548 hectáreas), considerado uno de los peores del último lustro.

En el incendio de Las Hurdes-Monsagro-Ladrillar, el más extenso, que ha afectado por el momento a 3.000 hectáreas y que afecta a provincias de dos comunidades ―Cáceres (Extremadura) y Salamanca (Castilla y León)―, se extreman los esfuerzos. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, desplazado este sábado hasta esa zona norte de Extremadura, ha señalado que “podemos estar un poquito más tranquilos que hace unas horas”, en referencia a este incendio y al de Monfragüe, reserva de la Biosfera y el parque Nacional, en Casas de Miravete. Según Marlaska, el riesgo para ese paraje protegido está “excluido”.

El incendio originado este jueves en Casas de Miravete, localidad próxima al Parque Nacional de Monfragüe, se mantiene activo, en el segundo mayor nivel de riesgo, y con una evolución “no favorable”, según señala este viernes la Junta de Extremadura. Hasta el momento han ardido 3.000 hectáreas, parte de ellas dentro del parque nacional. También se ha visto dañada una plataforma de buitre negro, una de las especies estrella del espacio protegido: técnicos de la Consejería de Medio Ambiente encontraron el viernes por la noche 11 polluelos muertos.

El fuego penetró en la noche del jueves en el área protegida de la reserva de la biosfera, y ya de madrugada, en el parque nacional. Los 130 vecinos de Casas de Miravete cacereña fueron desalojados a las 2.50 de la madrugada de este viernes y ubicados en un polideportivo del municipio de Almaraz. En la zona trabajaban desde esta mañana 116 efectivos de la UME y esta misma tarde el Gobierno extremeño ha movilizado a otros 250 bomberos, aparte de los 220 que ya había desplegados en la zona y los ocho medios aéreos. Los grupos ecologistas ya han alertado sobre el peligro que acecha a las colonias de buitre negro que habitan la zona.

Preocupa también la evolución del incendio de Mijas (Málaga). Más de 3.000 personas han sido ya desalojadas a consecuencia del fuego que se declaró este viernes en la sierra de la localidad malagueña. A lo largo de la madrugada, 765 vecinos de la zona de Pinos de Alhaurín, en Alhaurín de la Torre, han tenido que abandonar sus casas ante la cercanía de las llamas. Se suman a las 2.300 personas que también debieron dejar sus viviendas tanto en ese municipio como en Alhaurín el Grande por precaución y ante la virulencia de las llamas. El fuego arrancó poco después de las 12 del mediodía en el paraje natural de El Higuerón, en la Sierra de Mijas, pero el viento de levante lo fue llevando hacia el norte, acercándose a los dos Alhaurines y quemando 800 hectáreas en apenas cuatro horas. Más de 200 bomberos y 15 medios aéreos trabajaron durante todo el día en la extinción de un fuego que ocupaba más de ocho kilómetros en línea recta y donde las llamas superaron los 20 metros de altura. Sin contar este fuego, en la provincia de Málaga han ardido ya unas 4.500 hectáreas en lo que va de año.

El fuego de Navafría ha obligado a evacuar a 200 personas de la localidad segoviana y se ha requerido la ayuda de la Comunidad de Madrid, que ha enviado tres helicópteros. Estos dos frentes se encuentran en nivel 2 de peligrosidad, el segundo más alto. La comunidad no ha actualizado aún este sábado la cifra de hectáreas por cada uno de los incendios del territorio. El principal incendio en Castilla y León, con todo, sigue siend oel de Monsagro (Salamanca), que permanece activo desde el martes, aunque la Consejería de Medio Ambiente ha informado este sábado de que los cortafuegos aplicados por los bomberos “han funcionado” en el sector de El Maíllo y han permitido mejores perspectivas para su extinción. En la misma comunidad, los recursos de la UME han actuado en Figueruela de Arriba (Zamora), muy cercana a la sierra de la Culebra, donde hace poco más de un mes ardieron unas 25.000 hectáreas. Las elevadas temperaturas y el subsuelo aún caliente por aquellas llamas han propiciado que broten más incendios en esa zona del oeste zamorano.

En Galicia, el foco más complicado se concentra en las áreas de Folgoso do Courel y A Pobra do Brollón, en la provincia de Lugo, donde se mantiene la alerta activa por proximidad a núcleos habitados. En Folgoso do Courel los tres incendios que siguen activos afectan ya las 2.000 hectáreas calcinadas. El conselleiro de Medio Rural, José González, ha incidido en que “el mayor foco de preocupación” está en la Montaña de Lugo, si bien los medios están actuando y no se han producido desalojos, a excepción de la evacuación preventiva que tuvo lugar este jueves de 40 jóvenes de un campamento en A Pobra do Brollón, que pasaron la noche en el pabellón de deportes.

Precisamente en esta zona de Lugo sigue decretada como medida preventiva la alerta por el incendio registrado en la parroquia de Saa, aunque Medio Rural informó que el peligro para la población había remitido, informa Europa Press. Este incendio permanece activo desde las 20,37 horas de este jueves y afecta a una superficie provisional de 550 hectáreas. Hasta el momento se han movilizado para su control dos helicópteros y cuatro aviones.

Con información de Nacho Sánchez, Juan Navarro y Elisa Lois.

Enlace de origen : Los servicios de emergencia luchan contra 35 incendios, 19 sin controlar