Nadal: “No sé qué pasará después de este torneo”

Son casi las dos de la madrugada y Rafael Nadal departe ante un centenar de periodistas. Luce una gorra, la misma ropa con la que ha competido y todavía está emocionado por el cariño recibido por parte de la grada de la Chatrier, que este martes ha jugado y se ha posicionado en una velada “especial” ante Novak Djokovic. Del “¡Caglos, Caglos, Caglos!” que le ha dedicado a Alcaraz a media tarde al “¡Rafa, Rafa, Rafa!” que sella una sesión nocturna a flor de piel.

“La grada ha sido increíble desde el principio del torneo. Sé que no voy a estar muchas más veces aquí, así que el sentimiento de jugar este torneo y con este apoyo es muy difícil de describir”, agradece el tenista y también milagrero, porque lo de Nadal escapa a la lógica. Sucedió en Melbourne –tras más de medio año sin competir– y, quién sabe, el domingo a más tardar, tal vez pueda repetir la hazaña en París.

Como nexo, el dichoso pie izquierdo y el síndrome de Müller-Weiss. Esa lesión que no tiene cura y difícil remedio. No quiere profundizar en el tema y emplaza a la resolución del torneo para especificar, pero adelanta: “Si no soy capaz de encontrar una solución o alguna mejora todo se hace mucho más complicado. Voy a seguir peleando, pero de momento no la tenemos”.

Prosigue Nadal: “Hablaremos después del torneo y entenderéis un poco todo. Pero por ahora, vamos a dejarlo todo. No sé qué puede pasar después de aquí. Creo que aquí puedo competir y después ya veremos cómo queda todo. Ahora mismo no es momento de dar explicaciones, pero la tiene. Cuando termine os lo explicaré. A partir de ahí, vamos a estar centrados en estas semifinales”.

El campeón de 21 grandes dice que los tres últimos meses han sido difíciles y que su equipo le ha ayudado a continuar. A la fisura que le apartó de la competición durante mes y medio –sufrida en marzo, en las semifinales de Indian Wells contra Alcaraz– le añadió luego el último disgusto por el pie. Sucedió en Roma, a apenas 10 días del comienzo de Roland Garros. “Tengo la confianza en que aquí no me va a molestar”, dijo al aterrizar en el Bois de Boulogne.

“No he ganado nada”

Y, de momento, no solo aguanta sino que su tenis se redimensiona cuando ha llegado la hora de la verdad. “No he ganado nada”, puntualiza. “Esto eran unos cuartos de final, pero me he ganado la oportunidad de volver en dos días en un torneo que significa mucho para mí. Es una gran noche, pero por experiencia sé que las emociones suben y bajan rápido. El objetivo es estar centrado en el siguiente partido”, agrega a la vez que sentencia: “Ha sido el mejor de los cuatro últimos meses. Es un poco sorprendente para mí. En el día que más lo necesitaba, he conseguido sacar un nivel que pensaba que no tenía”.

Nadal dice que no se le debería haber escapado el segundo set y que si ha ganado es porque ha dominado más y ha sabido recuperar la agresividad tras el paso atrás. También comenta que esta vez, junto al desembarco de 2015, muchas dudas y angustias entonces, ha sido la que más justo ha llegado a París. En condiciones más precarias. Y eso, subraya, aporta un valor que “va mucho más allá” de lo que pueda ocurrir de aquí en adelante; “una energía interna muy importante”.

Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.

Enlace de origen : Nadal: “No sé qué pasará después de este torneo”