Un detenido por la desaparición de una mujer en un pueblo de Valladolid
La Guardia Civil ha detenido a un hombre por su presunta implicación en la desaparición de Esther López de la Rosa, de 35 años, hace 12 días en Traspinedo (Valladolid, 1.100 habitantes). Desde la noche del miércoles 12 de enero, la mujer está en paradero desconocido. Aquella noche estuvo viendo un partido de fútbol con amigos. Cuando regresaba a casa, sus amigos la dejaron cerca de una urbanización próxima a su pueblo. En esa zona se encuentra la casa de hombre, arrestado este sábado, cuya identidad no había trascendido hasta que los vecinos observaron qué domicilio se estaba investigando. Según sus testimonios, el arrestado se llama Ramón y es conocido en la zona como El Manitas.
Las autoridades han precintado la vivienda y la han registrado en busca de pruebas que revelen certezas sobre lo ocurrido con López. Los vecinos del lugar y de localidades colindantes han batido los pinares en los últimos días en busca de la desaparecida, sin éxito.
Las sospechas de la desaparición involuntaria comenzaron la misma noche del miércoles 12 de enero, cuando un grupo de amigos de Traspinedo, entre los que encontraba Esther López, quedaron en una bodega para ver un partido de fútbol entre el Real Madrid y el Fútbol Club Barcelona. Los jóvenes permanecieron juntos un rato más tras el fin del encuentro, hasta que decidieron volver a sus casas. Dos compañeros de Esther López la llevaron en coche desde una zona de la localidad hacia el núcleo de la localidad. Tras una pequeña discusión, ya a la altura de una zona residencial, El Romeral, la mujer les pidió apearse, según fuentes cercanas al caso. El área residencial está pegada a la carretera nacional N-122, cercana a Traspinedo, donde ella tiene su residencia familiar. Desde el punto donde descendió del vehículo hasta su vivienda, en el centro del pueblo, hay unos 10 minutos andando, según una persona de la zona.
Desde entonces, no ha vuelto a tenerse constancia de ella, ni visual ni telefónica, pues su móvil está apagado desde entonces. El punto donde sus amigos la dejaron se encuentra cerca de la residencia de Ramón, de unos 40 años, que cuenta a su vez con antecedentes de episodios violentos en el pueblo, con agresiones en bares cercanos. Hace un año, en el bar La Maña agredió con un cuchillo e hirió en un brazo a otro hombre por una apuesta.
El responsable de los agentes de Guardia Civil desplegados en el terreno, Javier Peña, ha informado este fin de semana de que están rastreando en el chalet del arrestado, una labor que podría durar “dos o tres días” para seguir con una “inspección ocular detallada y minuciosa”. Las autoridades han asegurado que todas las hipótesis y las líneas de investigación continúan abiertas.
La detención del sospechoso se produjo horas después de que la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil se hiciera cargo de la investigación. Los coordinadores del dispositivo de búsqueda han incorporado un dron para sobrevolar los amplios pinares que rodean este municipio de Valladolid y van a contar con la ayuda de buzos especializados para rastrear el Duero y el canal, cerca del domicilio del sospechoso.
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Esther López mide aproximadamente 1,65 metros, tiene el pelo castaño y largo, y ojos marrones. La noche del miércoles 12 de enero vestía pantalones vaqueros negros y una cazadora de lana. Los familiares de López han agradecido la implicación popular en las batidas que se han afanado estos días, de intenso frío en esta parte de Valladolid, por hallar alguna noticia sobre la mujer.
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